Arona
Grupos ecologistas protestan contra el PGO por un centro comercial costero
Hengua y Aiche afirman que afectaría a un yacimiento paleontológico
BLANCA SALAZAR / ARONA (La Opinión de Tenerife)
Los grupos ecologistas Hengua y Aiche han presentado alegaciones al Plan General inicialmente aprobado en Arona al comprobar la existencia de un solar con uso comercial en la Playa del Búnker (Las Américas), lugar declarado como Bien de Interés Cultural con categoría de zona paleontológica y que, en su opinión, sufriría una afección importante si se construyera un edificio.
Las asociaciones Hengua y Aiche, ambas con sede en Arona, explican en la alegación al PGO que han dirigido al alcalde, Alberto González, que la ubicación de esa parcela que se propone como uso comercial "afectará directamente a una parte muy importante de un Bien de Interés Cultural con categoría de Zona Paleontológica conocido como Playa del Búnker-El Guincho" y que fue declarado por el Cabildo de Tenerife a través de una resolución fechada el día tres de diciembre de 2003. Añaden en esta alegación que la parcela que se quiere destinar a uso comercial invade el límite marítimo-terrestre, con lo que vulneraría la legislación estatal de Costas. Especifican en este sentido que la zona de protección costera en esta parte de Playa de Las Américas está delimitada actualmente por el paseo peatonal, y que tal parcela comercial está situada por debajo de ese paseo (en las inmediaciones del Hotel Conquistador). Tras reseñar "las posibles consecuencias de impacto visual en alturas y rasantes de esta posible construcción", solicitan al alcalde que sea "retirada de forma definitiva del Plan General de Ordenación Urbana del municipio de Arona esta propuesta de uso comercial para este terreno marítimo" y que se tomen "las medidas legales y permanentes de protección y salvaguarda de esta parte del litoral. Durante el plazo de exposición pública de la versión 2005 del Plan General de Ordenación inicialmente aprobado por el Ayuntamiento de Arona, se corrió la alarma entre grupos ecologistas de toda la Isla por la calificación comercial de esta parcela que, según las fuentes consultadas, ha sido promovida por el empresario Santiago Puig. Fuentes municipales han informado que esta calificación permanece en el PGO "por un error" y que mientras el alcalde, Alberto González, quiere suprimirla, el edil de Urbanismo, Manuel Barrios, defiende su permanencia, "pugna por la que han tenido varias y sonadas discusiones".
Pugna entre ecologistas y empresarios
El expediente para la declaración del BIC con categoría de zona paleontológica fue incoado por el Cabildo de Tenerife en mayo de 2001, a propuesta de la asociación Aiche, y desde ese momento los integrantes de la asociación y simpatizantes de otros grupos ecologistas iniciaron una cruzada con la Consejería insular de Turismo (a la que denunciaron por los daños que podía sufrir la zona paleontológica con las obras de embellecimiento del paseo marítimo), y contra empresarios turísticos de la zona. Su batalla con la parte empresarial aludía a la sociedad Europe Tenerife SA por la piscina que posee en la parte del litoral aronero que se proponía proteger, y contra Santiago Puig en representación de la sociedad Playas de Troya. Y aunque las alegaciones empresariales lograron reducir el BIC, está claro que su cruzada continúa.
Grupos ecologistas protestan contra el PGO por un centro comercial costero
Hengua y Aiche afirman que afectaría a un yacimiento paleontológico BLANCA SALAZAR / ARONA (La Opinión de Tenerife)
Los grupos ecologistas Hengua y Aiche han presentado alegaciones al Plan General inicialmente aprobado en Arona al comprobar la existencia de un solar con uso comercial en la Playa del Búnker (Las Américas), lugar declarado como Bien de Interés Cultural con categoría de zona paleontológica y que, en su opinión, sufriría una afección importante si se construyera un edificio.
Las asociaciones Hengua y Aiche, ambas con sede en Arona, explican en la alegación al PGO que han dirigido al alcalde, Alberto González, que la ubicación de esa parcela que se propone como uso comercial "afectará directamente a una parte muy importante de un Bien de Interés Cultural con categoría de Zona Paleontológica conocido como Playa del Búnker-El Guincho" y que fue declarado por el Cabildo de Tenerife a través de una resolución fechada el día tres de diciembre de 2003. Añaden en esta alegación que la parcela que se quiere destinar a uso comercial invade el límite marítimo-terrestre, con lo que vulneraría la legislación estatal de Costas. Especifican en este sentido que la zona de protección costera en esta parte de Playa de Las Américas está delimitada actualmente por el paseo peatonal, y que tal parcela comercial está situada por debajo de ese paseo (en las inmediaciones del Hotel Conquistador). Tras reseñar "las posibles consecuencias de impacto visual en alturas y rasantes de esta posible construcción", solicitan al alcalde que sea "retirada de forma definitiva del Plan General de Ordenación Urbana del municipio de Arona esta propuesta de uso comercial para este terreno marítimo" y que se tomen "las medidas legales y permanentes de protección y salvaguarda de esta parte del litoral. Durante el plazo de exposición pública de la versión 2005 del Plan General de Ordenación inicialmente aprobado por el Ayuntamiento de Arona, se corrió la alarma entre grupos ecologistas de toda la Isla por la calificación comercial de esta parcela que, según las fuentes consultadas, ha sido promovida por el empresario Santiago Puig. Fuentes municipales han informado que esta calificación permanece en el PGO "por un error" y que mientras el alcalde, Alberto González, quiere suprimirla, el edil de Urbanismo, Manuel Barrios, defiende su permanencia, "pugna por la que han tenido varias y sonadas discusiones".
Pugna entre ecologistas y empresarios
El expediente para la declaración del BIC con categoría de zona paleontológica fue incoado por el Cabildo de Tenerife en mayo de 2001, a propuesta de la asociación Aiche, y desde ese momento los integrantes de la asociación y simpatizantes de otros grupos ecologistas iniciaron una cruzada con la Consejería insular de Turismo (a la que denunciaron por los daños que podía sufrir la zona paleontológica con las obras de embellecimiento del paseo marítimo), y contra empresarios turísticos de la zona. Su batalla con la parte empresarial aludía a la sociedad Europe Tenerife SA por la piscina que posee en la parte del litoral aronero que se proponía proteger, y contra Santiago Puig en representación de la sociedad Playas de Troya. Y aunque las alegaciones empresariales lograron reducir el BIC, está claro que su cruzada continúa.
